El frustrado llamado a licitación para el servicio de comidas a las personas privadas de la libertad y los agentes penitenciarios sigue despertando algunas sospechas y la Bicameral de Seguridad anticipó que "no descartan presentar un pedido de informe al Ministerio de Seguridad" a cargo de Mercedes Rus.
Desde el Ministerio de Seguridad aseguraron que "no hay nada raro" pero existen algunos elementos que despertaron las sospechas de los organismos de control como la no presentación de Clisa Interior SA o el rechazo de la oferta de la única empresa que se presentó al concurso público,Bio-Limp Soluciones de Calidad SA.
En este contexto se trata de un contrato millonario de 56.400 millones aunque la cifra final seguramente será superior debido a las habituales redeterminaciones de precios de las raciones alimentarias.
Lo que llamó la atención es que Clisa Interior S.A. no presentó a tiempo toda la documentación en el sistema informático oficial cuando durante 10 años participó de estas licitaciones que significan un negocio de 50 millones de dólares.
Hay que recordar que esta empresa no solo tiene el servicio de comida a la Penitenciaria. También es proveedora de las raciones en el hospital Schestakow, y realiza el servicio de limpieza en ese nosocomio y en Tribunales por ese motivo nadie se explica la demora que tuvieron en presentar la documentación en un concurso para nada despreciable.
El segundo gran interrogante es el error que cometió la única empresa oferente, con vasta experiencia en Buenos Aires, que no acercó la garantía que imponía el pliego.
Bio Limp Soluciones de Calidad S.A. presentó dos alternativas para cubrir la demanda de 4 millones de viandas para alimentar a detenidos y agentes penitenciarios durante 24 meses, una por $59.000 millones y otra por $53.000 millones pero no prosperó porque no cumplió con el requisito mencionado.
Ahora el Ministerio de Seguridad anunció el llamado a una contratación directa (la apertura de sobres se realizará el próximo 10 de marzo), con los requisitos y exigencias originales.
Habrá que ver si en esta contratación directa se presentan varios oferentes o solamente lo hará la empresa Clisa que desde hace 10 años es el proveedor elegido por el gobierno.
Antecedentes
La anterior licitación para adquirir raciones alimentarias para el sistema penitenciario provincial se adjudicó a Clisa, en septiembre de 2022. La empresa que hoy brinda el servicio en todos los complejos penitenciarios bajo la órbita del gobierno provincial cuenta actualmente con más de 300 empleados y tiene plantas de elaboración propias en Las Heras y San Rafael.
Clisa fue la elegida para venderle al Estado cuatro millones de raciones alimentarias durante dos años. El presupuesto inicial fue de $4.548 millones, aunque finalmente la empresa terminó recibiendo un monto muy superior.
El valor unitario de la raciones era, en septiembre de 2022, de $1.137. Pero luego de sucesivas actualizaciones de valores, en medio de una inflación galopante, en octubre del año pasado el costo de cada vianda diaria llegó a $10.894,91. Un incremento de 860%, por encima incluso del Índice de Precios al Consumidor (IPC) registrado en ese período, que fue de 682%.
Los números del nuevo proceso lanzado por el Ejecutivo siguen por debajo de los valores del mercado. En tal sentido, señalaron que Seguridad propone pagar $14.100 por cada ración, mientras que el Servicio Penitenciario Federal destina entre $19.000 y $22.000 por vianda, que incluye también cuatro comidas diarias.