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En Guaymallén: mataron a piedrazos y palazos a un hombre

Sábado, 20/07/24 19:00

Su nombre era Osvaldo Ricardo Ramos y tenía 58 años. Al parecer, intervino en una discusión entre una mujer y un hombre, que desembocó en la agresión fatal.

Un hombre fue asesinado a piedrazos y palazos la tarde de este sábado en Guaymallén. La víctima, identificada como Osvaldo Ricardo Ramos, tenía 58 años. Al parecer, quiso intervenir en una discusión que mantenían una mujer y un hombre, que desembocó en la agresión fatal.

De acuerdo con la primera información policial, pasadas las 15 el hombre conducía su Toyota Hilux acompañado por un amigo por la zona de Buena Nueva. Mientras pasaban por el cruce de calles Rópolo y Serú, advirtieron que una pareja discutía.

Acto seguido, sostiene la reconstrucción, Ramos descendió del rodado para auxiliar a la mujer, pero su pareja comenzó a tirar piedras contra la camioneta y se dio a la fuga hacia el norte de Serú.

La víctima lo persiguió e inició una pelea con el sospechoso, en la que fue atacado con una piedra y un palo, surge del procedimiento. Luego de dejarlo malherido y tendido sobre la vereda de un quiosco, el autor huyó del lugar.

Aparentemente, fue un fuerte golpe en la cabeza lo que le provocó la muerte, tal como pudo constatar personal del Servicio de Emergencias Coordinado (SEC) que llegó hasta la escena del crimen, localizada entre los barrios Suyai y Circuito Park.

En Guaymallén: mataron a piedrazos y palazos a un hombre

En el lugar también se hicieron presentes uniformados de la jurisdicción, efectivos de Investigaciones y la Policía Científica para iniciar las labores correspondientes bajo las directivas del fiscal de Homicidios Gustavo Pirrello.

Pasadas las 16, no se habían registrado detenidos por el asesinato y los detectives buscaban avanzar sobre la identidad del homicida a través de las averiguaciones que llevaban adelante en el teatro del hecho.

El operativo que se desarrolla en el lugar cuenta con móviles de la Policía de Mendoza, personal de Investigaciones y Policía Científica. Son horas claves para lograr la identificación de los agresores