La Liga Sanrafaelina de Fútbol suspendió a un jugador de San Luis Gonzaga por dos años tras agredir a un juez de línea y además sancionó con dureza a varios jugadores de esa institución tras el escándalo ocurrido en el partido contra El Molino.
Luego en una decisión que no se puede discutir porque no se puede tolerar la violencia en las canchas de juego, ni fuera de ellas, suspendió al club por amenazas que recibió el director del Colegio de Árbitros Andrés Merlos.
En este marco donde la Liga marcó el ejemplo estaría bueno, así lo dicen dirigentes de otros clubes, que las sanciones sean parejas para todos los clubes.
Es que en muchos encuentros hay incidentes que pasan desapercibidos como el que ocurrió después del encuentro de Reserva entre Deportivo Argentino y Pedal donde hubo una batahola en las tribunas y piñas entre simpatizantes de ambos equipos.
Recuperar la familia en los espectáculos deportivos fue una de las consignas de esta nueva comisión. Si bien esta vez el afectado fue un reconocido árbitro de fútbol como Andrés Merlos se espera que se actúe de la misma manera ante otros hechos que muchas veces se minimizan porque no hay gente conocida.