Primer paso para desarrollar tres minas de cobre en el sur con la Ley 7722
Comenzarán la exploración de tres yacimientos en Malargüe para determinar si tienen suficiente mineral para ser extraído. En esta primera etapa se invertirán 20 millones de dólares.
En los últimos días el Senado y la Cámara de Diputados de Mendoza autorizaron la exploración de los yacimientos de cobre El Burrero, Las Choicas y La Adriana ubicados en Malargüe.
El objetivo es determinar si cuentan con una cantidad de mineral que sea rentable para ser extraído. Y en caso de ponerse en producción, se haría mediante métodos que no utilizarán las sustancias prohibidas por la Ley 7222, según aseguran desde el gobierno provincial.
La Legislatura dio su aprobación debido a que tuvo en cuenta que contaban con sus respectivas declaraciones de impacto ambiental para la etapa de exploración. Se necesitará otro estudio ambiental en caso de querer iniciar la exploración de las minas.
Los tres proyectos serán llevados adelante por la empresa Geometales SA. El Burrero planea una perforación de 23 pozos exploratorios, cuya profundidad varía entre 400 y 750 metros. En Las Choicas se perforarán 17 pozos, mientras que en La Adriana se hará un trabajo de prospección, es decir, exploración del subsuelo.
Desde la Provincia indicaron que "las inversiones estimadas para realizar estos trabajos alcanzan 20 millones de dólares y, como ocurre en la mayoría de los proyectos, se realizarán en varias campañas que involucrarán a pymes y mano de obra mendocina".
Estos yacimientos de cobre se suman a las tareas de exploración que ya se vienen realizando en Hierro Indio (hierro) y Cerro Amarillo (cobre).
La ministra de Energía y Ambiente, Jimena Latorre, dijo que "la exploración y aprovechamiento de nuestros recursos minerales se erige como un imperativo fundamental para hacer frente a la creciente demanda global de cobre en la transición hacia las energías renovables, y además, representan una enorme oportunidad de crecimiento económico para la provincia de Mendoza".
Argentina lleva cinco años sin producir cobre y hoy, según proyecciones internacionales, se posiciona como uno de los países con mayor potencial, debido a que es uno de los minerales con mayor demanda y mayor proyección a futuro en el mundo por sus múltiples aplicaciones en la construcción, las telecomunicaciones, la electrónica y el transporte.