Por la agresión de un padre al árbitro expulsaron al Club Azul y hay polémica

La Asociación Futsal San Rafael decidió expulsar al Club Azul por la brutal agresión cometida por el padre de un jugador de esa entidad a un árbitro el sábado pasado cuando disputaban un partido de la categoría C15 frente al San Rafael Tenis Club, hecho que ha reflejado Info YA!.

Además sancionó a dos jugadores de ese club con suspensiones, a uno le dieron un año y a otro cinco partidos.

La AFUSSAR tomó esta drástica decisión en base a los artículos 41, 48 y 52 de su reglamento que dispone la pena de expulsión "a toda entidad cuyas condiciones de cultura deportiva de sus asociados, dirigentes, o público partidario hagan peligrosa su actuación en la Asociación", "promuevan incidentes entre o contra cualquier persona" y protagonicen "todo hecho o acción que atenta contra el desarrollo del Fútbol de Salón o contra el espíritu de la Asociación".

Esto inmediatamente causó revuelo entre los jugadores, papás, socios y demás integrantes del Club Azul, que evaluaron como extrema la sanción al considerar que por la conducta del padre agresor y algunos otros que causaron el incidente el sábado castigan a toda una institución y dejan sin jugar a más de 200 niños y adultos que practican futsal en distintas categorías.

Desde la comunidad del Club Azul se expresaron al respecto rechazando la medida de la Asociación.

Un grupo de familias de la entidad expresó a través de un comunicado que "no avalamos la violencia, no aceptamos la violencia en ninguna de sus formas" y "no rechazamos la sanción hacia los participantes de los hechos" pero advirtieron que "si expulsan al club de la Asociación nuestros niños quedan a la deriva, son ignorados, sin posibilidad de absolutamente nada" y "terminan siendo parte de la misma sanción que recae sobre las personas participes de ejercer violencia".

Solicitan que "que se piense en los niños, en los jóvenes y en todas las personas que creemos y predicamos por una sociedad de valores, de deporte y de salud".

Por su parte, otro grupo que se autodenomina "La Familia de Azul Futsal" le dirigió una carta a AFUSSAR en la que manifiesta su "más firme repudio y descontento por la decisión tomada de expulsar a Azul Futsal de la liga, en consecuencia de un incidente aislado y lamentable ocurrido durante un partido de futsal".

Recordaron que "el incidente que motivó esta expulsión fue protagonizado por una persona ajena al club, un padre de un jugador menor de edad, quien actuó de manera inapropiada y violenta. Sin embargo, no podemos aceptar que toda la comunidad del club, que nada tuvo que ver con el hecho, sea responsabilizada y castigada por la acción de un individuo".

Consideraron además que, "como club, hemos demostrado a lo largo de los años un comportamiento ejemplar en todos los aspectos deportivos y éticos, y que la sanción colectiva no hace justicia con el resto de los jugadores, padres y miembros que se ven afectados por una situación que escapó a su control".

Ante ello pidieron "una revisión justa de la decisión tomada, apelando a la sensibilidad de las autoridades para que no se castigue a quienes no somos responsables de la violencia que se vivió en ese momento".

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