La gelatina "mágica" que ayuda a bajar de peso y cura los dolores de rodilla

Uno de los nutrientes esenciales para el organismo es el colágeno, que constituye aproximadamente el 30% de las proteínas del cuerpo. Este macronutriente es vital para mantener la salud de las articulaciones, la piel, los huesos y los cartílagos.

La falta de colágeno puede desencadenar molestias como el dolor de rodilla, un síntoma común con el envejecimiento que limita las actividades diarias.

¿Por qué es importante consumir colágeno?

El colágeno desempeña un papel crucial en el cuerpo al proporcionar estructura a la piel, prevenir las arrugas y evitar la flacidez. Además, contribuye a la densidad y fortaleza ósea, lo que ayuda a prevenir enfermedades como la osteoporosis y reduce el riesgo de fracturas.

También es fundamental para la salud de las articulaciones, ya que refuerza los cartílagos que amortiguan los golpes y, a nivel cardiovascular, fortalece los vasos sanguíneos.

La gelatina: una fuente natural de colágeno

Un alimento que destaca por su alto contenido en colágeno es la gelatina, muy popular en dietas por ser saciante y baja en calorías . Si se le agregan huesos durante su preparación, se convierte en una fuente aún mayor de colágeno, aminoácidos y minerales.

Este tipo de gelatina casera no solo contribuye a la salud de las rodillas y las articulaciones, sino que también favorece la pérdida de peso al controlar el apetito.

Además, el colágeno presente en la gelatina fortalece el cabelo y las uñas al nutrir las estructuras de queratina del cuerpo. También ayuda en la reparación muscular después del ejercicio gracias a sus aminoácidos.

Cómo preparar gelatina casera con huesos ricos en colágeno

La gelatina en polvo es una opción popular, pero prepararla en casa permite obtener mayores beneficios nutricionales.

A continuación, una receta simple para hacer tu propia gelatina rica en colágeno.

Ingredientes:

Huesos de animales (preferiblemente con cartílagos y tejidos conectivos)Agua filtradaVinagreVegetales, frutas y especias para dar sabor

Preparación:

Lavar bien los huesos con agua fría.Colocar los huesos en una olla grande y cubrirlos con agua filtrada.Añadir una cucharada de vinagre y llevar el agua a ebullición.Hervir entre 6 y 24 horas (a mayor tiempo, más colágeno).Retirar la espuma que se forma en la primera hora de cocción.Añadir vegetales, hierbas, frutas o especias para saborizar.Al finalizar el tiempo de cocción, colar el caldo para eliminar los huesos y restos.Dejar enfriar y refrigerar en envases herméticos. La gelatina se solidificará al enfriarse.